Quien Mucho Abarca: Quien Mucho Abarca
Yo sí veré el mensaje del rey
Circula por la red una propuesta (creo que surgida de una asamblea del 15M) para que nadie vea el mensaje de nochebuena del rey como muestra de desprecio por su persona y sobre todo por la institución monárquica. No parece muy necesaria la propuesta dado que pese a que es complicadísimo encontrar un canal sin el mensaje cada año bajasu audiencia. Yo trato de ser uno de sus espectadores cada año pese al boicot activo de mi señora, quien no soporta mis vicios televisivos (tertulias ultras y podredumbre televisiva en general).
Más allá de ese morbo (ciertamente compensado por el tono monocorde: es muy difícil mantener la atención sobre el muermo), el mensaje del rey me resulta un estimulante ejercicio de comentario de texto. Es un resumen perfecto del papel que desempeña el rey en nuestro régimen político: un sostén de los valores conservadores del régimen que pretende pasar por neutral para hacer pasar esos valores por valores neutrales. Disfrazado de una neutralidad que permite a todos los partidos de orden sentirse reflejadísimos en el mensaje (incluso el partido de la oposición últimamente encuentra en el discurso un cachete al gobierno, como si el gobierno no participase activamente en el discurso) suele ser un instrumento para colar valores y consignas del poder como si no se estuviera diciendo nada.
Apuesto a que en su discurso de hoy el rey no sólo hará elogios no muy disfrazados a la unidad de España (“juntos no sólo sumamos sino que multiplicamos“) sino que se podrá entrever que 2014 es el año de la salida de la crisis, que los sacrificios que hemos hecho TODOS servirán para tener firmes cimientos en la salida de la crisis, que hay que apoyar a los emprendedores, que este año hay elecciones europeas y ello nos recuerda la importancia de un proyecto de paz, prosperidad, libertad y democracia como es la Unión Europea y que en momentos como el actual hay que sumar esfuerzos y entendernos como hicimos en la Transición que nos ha traído el periodo más próspero y estable de nuestra Historia.
Inmediatamente saldrán portavoces del PP y del PSOE a mostrar su pleitesía y alabar el discurso del monarca. Que ya tiene que ser triste que en Nochebuena el partido te ponga de guardia para hacer la pelota al rey. Y los medios de comunicación nos repondran un amplio resumen del muermo.
Lo interesante del mensaje del rey es rescatar las consignas de régimen, esas frases aparentemente huecas pero cargadas de valor político, las anclas con las que las élites saqueadoras pretenden que el barco no se hunda aún más, que sólo se hundan los camarotes de mierda. Si veré el mensaje: si no me dejan en casa verlo en directo lo buscaré mañana en internet. Apuesto a que el mensaje es deliberadamente soporífero precisamente para que parezca una colección de naderías, una mera exhibición de sentido común. Pero ya nos dijo Gramsci que el sentido común es la manifestación de la hegemonía ideológica, en este caso es la manifestación de lo que las élites de nuestro régimen político quieren que sea hegemónico. Atentos.
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